Manual de herramientas para lidiar con las compañías de energía eléctrica

Publicado 30 de mayo del 2024

Activistas que piden energía limpia
Andrew Cullen/Reuters
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El acceso a electricidad limpia, segura y confiable no debería depender de la cantidad de dinero que tenga en su cuenta bancaria ni del lugar donde viva. Este manual de herramientas puede ayudarle a mejorar su acceso a la electricidad limpia.

Le preguntamos a cientos de personas sobre sus experiencias con los servicios que proporcionan las compañías de energía eléctrica. Sus respuestas revelan las enormes desigualdades que existen con el acceso, la asequibilidad y muchos otros problemas de la red eléctrica actual.

Esto no tiene por qué ser así. Equipados con su experiencia de vida, un profundo entendimiento de cómo funciona la red eléctrica y de cómo se ha llegado a esta situación, la gente como usted puede convertirse en una poderosa defensora de un sistema eléctrico mejor y más seguro.

Este conjunto de herramientas para lidiar con las compañías de energía eléctrica puede ayudarle. A continuación, usted encontrará información específica a su estado y materiales que desmitifican el lenguaje técnico utilizado en el sector eléctrico. Al final de la página hemos recopilado una lista de acciones y próximos pasos, cada uno de ellos orientado a construir un sistema de servicios de energía eléctrica más justo e inclusivo.

Paso 1: Información sobre tu estado

Ahora que estas lista/e/o para hacer cabildeo con las personas que toman decisiones, ¿por dónde se empieza? La respuesta es: depende… Usa la herramienta que ves abajo para encontrar la información sobre tu estado.

Paso 2: Conoce tu historia

Aunque la red eléctrica es un conjunto de objetos inanimados como cables y metal, nuestro sistema energético incluye todos los componentes tangibles e intangibles relacionados con la producción, la conversión, el suministro y el uso de la energía. Este sistema capta intrínsecamente las creencias discriminatorias de quienes lo diseñaron y ha creado condiciones perjudiciales para las comunidades a lo largo de generaciones.

Una gran cantidad de datos demuestra que nuestro sistema energético ha tenido un impacto desproporcionadamente negativo en la salud y el bienestar de las comunidades de raza Negra y de las personas Indígenas, de color (BIPOC) y de bajos ingresos. La ubicación de la infraestructura energética ha resultado en impactos desproporcionados, como la contaminación del agua y el aire, lo que a su vez ha acrecentado los problemas de salud de estos grupos. Agravando estas experiencias, están las injusticias energéticas, incluyendo:

Carga económica elevada de energía

La "carga económica de energía" de un hogar se refiere al porcentaje de los ingresos que se utiliza para pagar las facturas de energía del hogar. Se considera que dicha carga es elevada cuando un hogar debe gastar más del seis por ciento de sus ingresos en energía y es extremadamente elevada cuando el porcentaje es mayor al 10 por ciento. Las investigaciones demuestran que los hogares de bajos ingresos, los inquilinos y los hogares integrados por personas de raza Negra, hispanos, Indígenas y adultos mayores tienen cargas económicas de energía desproporcionadamente más altas en Estados Unidos. Según el Departamento de Energía de Estados Unidos (DOE, por sus siglas en inglés), la carga económica de energía de estos grupos es 8 por ciento en promedio, casi tres veces mayor a la de los hogares cuyos ingresos no son bajos.

Inseguridad energética

La inseguridad energética ocurre cuando los hogares, que a menudo tienen cargas económicas de energía elevadas, enfrentan dificultades para cubrir sus necesidades básicas. Según el Instituto para la Sostenibilidad Global de Boston University, "los impactos de la inseguridad energética coinciden con muchas de las líneas de fractura de la equidad social en general: ingresos, raza y etnia, así como el tipo y la tenencia de la vivienda." En el 2023, el DOE de Estados Unidos reportó que casi el 26 por ciento de todos los hogares estadounidenses experimentaron situaciones de inseguridad energética "casi todos los meses, algunos meses o durante 1 a 2 meses en el último año".

Inequidad energética

Un principio básico de la "equidad energética" es mitigar la desigualdad en el acceso a los recursos energéticos, un concepto comparativo en relación con sus circunstancias que a menudo hace que los grupos marginados sufran más que otros. Es importante señalar que pueden existir múltiples desigualdades en el sistema energético, tales como:

El racismo ambiental tiene un impacto significativo en nuestras comunidades. De acuerdo con un artículo reciente, "el lugar donde vivimos determina las oportunidades que tenemos de acceder a una educación de alta calidad, al empleo, a la vivienda, a los alimentos frescos o a los espacios al aire libre: todo esto contribuye a nuestra salud". Por ejemplo, la proximidad a las centrales eléctricas contaminantes juega un papel importante, ya que contribuye a la exposición a mayores concentraciones de partículas finas (PM 2,5) y a otras emisiones atmosféricas nocivas. Un estudio reciente descubrió que la exposición a concentraciones de PM 2,5 es mayor para los residentes de comunidades de menores ingresos; el estudio también descubrió que las disparidades son mayores por raza que por nivel de ingresos. En el 2016 se determinó que la concentración promedio de PM2,5 en la población de raza Negra era un 13,7 por ciento mayor que aquella de la población blanca. Además, en el 2020 casi el 40 por ciento de los niños estadounidenses de raza Negra vivían en lugares con malas condiciones sanitarias y ambientales, en comparación con sólo el 10 por ciento de los niños blancos.

La ubicación de las centrales de combustibles fósiles refleja una historia de políticas discriminatorias en materia de vivienda y medio ambiente, un legado conocido como redlining, una práctica que hoy en día es ilegal y que delimitaba las áreas donde vivían los residentes de raza Negra y las consideraba como inversiones de riesgo. En un artículo publicado en el 2023 se estudió la asociación histórica de las prácticas de redlining con la ubicación de las centrales eléctricas de combustibles fósiles y se estableció la correlación de que es más probable que las centrales eléctricas se ubiquen en vecindarios considerados como de grado D (sujetos al redlining), lo que implica un aumento en las emisiones de agentes contaminantes del aire, como óxidos de nitrógeno, dióxido de azufre y partículas finas.

Para hacer frente a estas inequidades duraderas, es necesario que nos esforcemos por cambiar la sociedad en distintos niveles, incluyendo nuestro sistema energético. La democratización del sistema energético mediante la implementación de principios de justicia energética es un cambio muy importante para lograr que la energía se considere como un derecho humano fundamental. Este cambio ayudará a empoderar a las comunidades para que participen de una forma más justa, activa y equitativa en las decisiones sobre nuestras fuentes de energía, la infraestructura necesaria para apoyarlas y sus costos asociados.

Mientras los municipios y las cooperativas colaboran para aumentar la participación pública, también debemos enfocarnos en mejorar los procesos democráticos de nuestra nación para garantizar que todas las voces sean escuchadas y estén representadas. Esto nos ayudará a desarrollar un sistema energético más sostenible y equitativo para todos. Los siguientes son algunos principios de justicia energética que pueden ayudarnos a lograr el cambio transformador que necesitamos:

Justicia distributiva

Considera los ingresos, los precios de la energía y las oportunidades de eficiencia energética, además de evaluar la distribución de los beneficios de la transición hacia una energía limpia. Este principio también reconoce el riesgo desproporcionado que enfrentan las poblaciones cercanas a las industrias energéticas contaminantes y perjudiciales.

Justicia procesal
Justicia restaurativa

Busca la reparación de los daños causados en el pasado a las personas y al medio ambiente y pide que se identifiquen e implementen soluciones sistémicas para abordar las causas.

Podría decirse que nuestro momento presente es el resultado de las decisiones que se tomaron en el pasado, o en las palabras de James Baldwin: "Somos nuestra historia". A medida que lidiamos con la crisis climática y luchamos por descarbonizar el sistema energético, nuestro momento presente nos ofrece la oportunidad de examinar una transformación continua de cada nivel del sistema energético para revolucionar nuestra forma de operar a fin de que sea reflexiva y considerada con todos. La historia no acaba aquí, sino que comienza con nosotros.

Ninguno de nosotros debe ser considerado como responsable de los errores de nuestros antepasados. Pero si hoy decidimos no hacer lo correcto y necesario, esa culpa nos pertenece

Nikole Hannah-Jones

La red eléctrica de Estados Unidos

La red eléctrica trabaja cada segundo de cada día a fin de proporcionarnos la electricidad que necesitamos para impulsar nuestras vidas modernas.

La red eléctrica es una inmensa red de líneas eléctricas y tecnologías que trabajan juntas para transportar la electricidad desde los lugares donde se genera (como las centrales eléctricas y los parques eólicos) hasta los lugares donde se utiliza (como los hogares, las escuelas, los hospitales y las industrias). La electricidad que se genera a partir de diversas fuentes de energía se suministra a hogares, empresas y otros usuarios finales en el momento exacto en que se necesita. Las centrales eléctricas, las líneas eléctricas y otras infraestructuras son los componentes visibles de la red, pero sus funciones vitales también dependen de la coordinación eficaz de una red de sistemas, instituciones, reglas y personas. Estos factores en conjunto desempeñan un papel fundamental en nuestras vidas diarias, desde el momento en que suena nuestro despertador hasta cuando preparamos el desayuno o vamos a hacer las compras. Dependemos de la energía a demanda en cualquier momento del día, algo en lo que casi nunca pensamos a menos de que ocurra un apagón.

El proceso

La generación de electricidad comienza tomando los recursos como el carbón, el viento o el gas fósil en su estado bruto y natural y convirtiéndolos en electrones que puedan alimentar los enchufes eléctricos de las oficinas, casas o aulas. Esta conversión generalmente se lleva a cabo en las centrales eléctricas a gran escala, como por ejemplo las plantas eólicas, los reactores nucleares o las centrales de carbón o combustibles fósiles.

Los electrones generados llegan a los consumidores a través de un sistema de subestaciones, transformadores y líneas de transmisión regionales y de distribución local. Cada vez más, la electricidad también se genera en instalaciones generadoras más pequeñas y distribuidas, como los paneles solares de los tejados o las granjas solares comunitarias. Cuando las instalaciones de generación se encuentran lejos de los usuarios finales, es necesario utilizar líneas de transmisión para transportar grandes volúmenes de electricidad de alto voltaje a través de largas distancias. Las líneas están conectadas a redes de distribución que, a su vez, suministran electricidad "a demanda" a los hogares, las escuelas y los lugares de trabajo. (Consulte esta explicación de UCS para obtener más información).

Reglamentación

La red eléctrica estadounidense se divide en tres grandes redes de transmisión: la Interconexión Este, la Interconexión Oeste y la Interconexión de Texas. Dentro de estas tres grandes entidades de transmisión hay sistemas interconectados de redes eléctricas regionales y locales.

Es importante destacar que la transmisión regional en todo Estados Unidos está regulada por siete "organizaciones regionales de transmisión" (o RTOs, por sus siglas en inglés) que planean y operan la red eléctrica. Estas RTOs administran los mercados de la electricidad para asegurarse de que haya suficiente suministro disponible en todo momento a lo largo de la región. Las RTO rinden cuentas a las empresas de servicios públicos afiliadas que son propiedad de los inversionistas, así como a los gobiernos estatales. La Comisión Federal Reguladora de Energía (FERC, por sus siglas en inglés), una agencia independiente y bipartidista del Departamento de Energía de Estados Unidos que regula la venta y transmisión de electricidad más allá de las fronteras estatales, se encarga de supervisar a las RTOs. FERC tiene autoridad e influencia sobre las RTOs para garantizar que cooperen y sean justas. FERC puede ayudar a atender y resolver los problemas entre los distintos participantes del mercado. En la actualidad, no hay una RTO en las regiones del sureste, suroeste o noroeste. En esas áreas del país, las empresas de servicios públicos propiedad de los inversionistas se encargan directamente de las necesidades de administración de la red.

Mientras que las RTOs ayudan a regular el sistema energético del país, la red de distribución de electricidad en sí, es decir, el sistema de cables que suministra electricidad a los usuarios finales en los hogares, las escuelas y las empresas, se regula mediante un método diferente. Estas redes administradas por grandes empresas de servicios públicos están reguladas a nivel estatal por comisiones o juntas, a menudo llamadas comisiones de empresas de servicios públicos (PUC, por sus siglas en inglés) o a veces comisiones de servicios públicos (PSC, por sus siglas en inglés).

¿Qué son las Comisiones de Empresas de Servicios Públicos (PUC)?

Las comisiones de empresas de servicios públicos (o PUC por sus siglas en inglés; en algunos estados se les conoce como Comisiones de Servicios Públicos o PSC) supervisan y regulan los servicios públicos en cada estado, tales como la electricidad, el gas, el agua, las aguas residuales y las telecomunicaciones. Estas comisiones reguladoras independientes fijan las tarifas de la electricidad que pagan los usuarios y efectúan una supervisión a nivel estatal. Por ejemplo, las comisiones determinan si se deben construir nuevas plantas (o fuentes) generadoras de electricidad u otras infraestructuras energéticas propuestas por las empresas de servicios públicos; su trabajo consiste en analizar cómo afectarán a los consumidores del estado los planes y las decisiones de negocios de las empresas de servicios públicos.

Como se indicó anteriormente, las PUCs tienen la importante función de "fijar las tarifas eléctricas adecuadas que las empresas de servicios públicos deben respetar". Por lo general, los miembros de las PUC, conocidos como comisionados, son responsables de garantizar que las empresas de servicios públicos proporcionen "un servicio razonable, adecuado y eficiente a los clientes a un costo razonable". La función de las PUC o PSC estatales en este sistema es participar en el proceso de toma de decisiones para analizar y aprobar las líneas de transmisión que transportan la electricidad en las regiones, así como garantizar que las empresas de servicios públicos suministren energía asequible y confiable a sus clientes.

Los distintos estados administran las PUCs de forma diferente

Las PUC tienen un impacto directo en los consumidores que pagan la electricidad, ya que ayudan a determinar qué tan asequible es la electricidad, qué tan confiable es el servicio eléctrico y otros factores como la calidad del aire local y los impactos climáticos. Pero existen diferencias de un estado a otro. En el sector eléctrico, cada estado se clasifica como "tradicionalmente regulado" o "reestructurado".

En los estados tradicionalmente regulados, las empresas de servicios públicos operan como monopolios y las PUCs regulan la planeación de los servicios eléctricos, los recursos que se utilizan para generar electricidad y el costo resultante de los servicios. Las PUCs de estos estados regulanla generación, la transmisión y la distribución delaelectricidad a los consumidores, mientras que las leyes y políticas adicionales suelen regir las inversiones de la industria eléctrica en infraestructura, a través de procesos como los "planes de recursos integrados" (o IRP, por sus siglas en inglés).

En los estados reestructurados (a veces conocidos como estados "desregulados"), las centrales eléctricas y la electricidad que generan pertenecen y se operan en un mercado competitivo, en vez de un monopolio. En estos estados, las PUC sólo regulan la distribución de electricidad a los consumidores, pero no suelen regulan la inversión en nuevas centrales eléctricas.

Todas estas responsabilidades de las PUCs tienen un impacto directo en los consumidores de electricidad en términos de la asequibilidad de la energía, la confiabilidad del servicio, la calidad del aire y el impacto climático.

¿Cómo toman decisiones las PUCs?

Las leyes o la constitución de cada estado crean y otorgan un poder reglamentario a las PUCs. Por lo tanto, la manera en que las PUCs funcionan y toman decisiones reguladoras varía de un estado a otro. Las PUCs generalmente toman decisiones a través de expedientes de regulación y procesos de elaboración de normas, los cuales se asemejan a los procedimientos judiciales y ofrecen una oportunidad para que las partes interesadas (a veces conocidas como "intervinientes") presenten sus comentarios o den su testimonio. En algunos estados, las PUCs también tienen la autoridad de hacer cumplir la ley y pueden imponer sanciones en caso de que no se respeten sus decisiones o reglas.

La importancia de una debida representación en las comisiones

Las PUCs suelen estar integradas por entre tres y ocho comisionados que son nombrados por el gobernador o elegidos por el público para cumplir mandatos de cuatro o seis años. Los comisionados tienen un poder significativo respecto a las decisiones críticas que afectan a los consumidores de energía, pero históricamente sus integrantes no han representado debidamente a las poblaciones más afectadas por problemas como las cargas económicas de energía elevadas y los cortes de electricidad. Una gran mayoría de los comisionados de todo el país son de raza blanca (82 por ciento) y hombres (65 por ciento).

La diversidad racial es baja; sólo el 11 por ciento de los comisionados son de raza Negra y el 3 por ciento son hispanos/latinos o asiáticos. Sólo dos de 197 comisionados se identifican como personas Indígenas. Esta disparidad racial es especialmente notable en los estados del sur que tienen una mayor proporción de habitantes de raza Negra. Por ejemplo, Mississippi nunca ha elegido a un comisionado de raza Negra, mientras que en Alabama y Georgia nunca ha habido una comisionada de raza Negra. Según indica un reporte de The Chisholm Legacy Project, los comisionados deben representar debidamente a las poblaciones más afectadas por las decisiones que toman. Esta gobernanza representativa es fundamental para garantizar que las normas, los planes y las soluciones de las PUCs cuenten con la retroalimentación de las personas que se verán más afectadas por ellos.

Además, un gran número de comisionados trabajaron anteriormente como integrantes de grupos de cabildeo o tienen vínculos con la industria de los combustibles fósiles, una relación que probablemente influye en las decisiones que toman sobre la industria que deben regular. En el 2022, todos los comisionados de Alaska, Oklahoma y Kansas habían trabajado anteriormente para compañías petroquímicas o eran propietarios de dichas empresas. Además, 13 comisionados actuales son antiguos integrantes de grupos de cabildeos o abogados que ahora se encargan de regular a las partes interesadas con las que trabajaron anteriormente.

Para obtener más información sobre las PUCs, los comisionados y el impacto del gobierno representativo, consulte Who Holds the Power: Demystifying and Democratizing Public Utilities Commissions de Jacqui Patterson y Charles Hua.

Las empresas de servicios públicos necesitan] ser conscientes de las dificultades a las que nos enfrentamos para que puedan ofrecer programas más accesibles para los clientes de bajos ingresos. No me pueden ayudar si no conocen mis problemas

Kiava Stewart, residente de Michigan y miembro de We Want Green Too

¿Cómo le afectan a usted las PUCs?

Asequibilidad

Si usted tiene dificultades para pagar su factura de electricidad, no está solo. La asequibilidad de la energía es un problema importante para muchos hogares estadounidenses y es algo que suele medirse en términos de la "carga económica de energía", es decir, el porcentaje de los ingresos brutos del hogar que se utiliza para pagar la electricidad y el combustible para la calefacción.

Se considera que dicha carga es asequible cuando representa el 6% o menos de los ingresos brutos de un hogar. Sin embargo, según el Departamento de Energía de Estados Unidos, los hogares de bajos ingresos (que representan alrededor del 44% de todos los hogares estadounidenses) pagan una carga promedio del 8,6%, mientras que hay hogares en algunas áreas del país que tienen una carga económica de energía del 30 por ciento.

Muchos hogares estadounidenses sufren de inseguridad energética y corren el riesgo de que la compañía eléctrica les corte el suministro. En la mayoría de los estados, las empresas de servicios públicos deben presentar a la comisión estatal cualquier solicitud de aumento de tarifas para su aprobación, por lo que es fundamental que los consumidores compartan sus experiencias con los comisionados para fijar tarifas que reflejen el interés público y evitar las medidas depredadoras de cobro de deudas que llevan a cabo algunas empresas de servicios públicos. Todas las personas deben tener el derecho a una energía asequible. En algunas comisiones es más fácil intervenir que en otras; haga clic abajo para obtener más información sobre cómo se regula la electricidad en su estado.

Confiabilidad

Es esencial que los hogares cuenten con un acceso confiable a la electricidad. Los apagones repentinos, repetitivos o prolongados pueden poner a las personas en riesgo de perder sus alimentos y medicamentos o de enfermarse de calor o frío e incluso pueden impedir que utilicen los dispositivos médicos que salvan vidas, como los concentradores de oxígeno.

Todas las personas deben tener el derecho a un servicio energético confiable. Una de las principales funciones de las PUCs estatales es garantizar que las empresas locales de servicios públicos proporcionen un servicio confiable a sus clientes. En varios estados, las empresas de servicios públicos están obligadas a presentar planes conocidos como "Planes de Recursos Integrados" (o IRP, por sus siglas en inglés), los cuales explican cómo planea la empresa suministrar energía confiable y asequible a sus clientes.

Los estados suelen requerir que estos planes sean revisados por las PUCs estatales. Además, las PUC estatales pueden requerir que las empresas de servicios públicos den mantenimiento y reparen adecuadamente las líneas de distribución. La mayoría de las PUC también proporcionan un mecanismo para que los clientes y las organizaciones presenten sus comentarios públicos por escrito y también pueden llevar a cabo audiencias públicas para que la gente exprese sus comentarios y preocupaciones sobre los planes de la empresa de servicios públicos.

Seguridad y salud

La energía es esencial para nuestra salud. Por ejemplo, la electricidad nos permite hacer uso del aire acondicionado en los días calurosos y de los equipos de refrigeración para mantener seguros nuestros alimentos. La producción de energía también puede tener impactos negativos en la salud de nuestra comunidad, especialmente en poblaciones vulnerables como los ancianos. La proximidad a las centrales de generación a base de combustibles fósiles, como las plantas de carbón, puede provocar impactos en la salud, tales como asma, problemas cardíacos, cáncer y trastornos neurológicos derivados de la contaminación por mercurio, plomo, dióxido de azufre y material particulado.

Además, el sistema de distribución de electricidad, como por ejemplo las líneas eléctricas que pasan por encima de nuestras calles, debe recibir un mantenimiento adecuado para evitar posibles daños o caídas de las líneas eléctricas, lo que podría tener consecuencias peligrosas y causar la interrupción del servicio. En varios estados, las empresas locales de servicios públicos están obligadas a presentar "Planes de Recursos Integrados" (o IRP) y a obtener la aprobación de la PUC del estado. En dichos planes deben detallar el tipo de generación de energía en el que invertirán las empresas, incluyendo la toma de decisiones sobre inversiones en combustibles fósiles o energías renovables.

Además, es posible que la PUC tenga que aprobar cualquier inversión que realicen las empresas de servicios públicos en líneas de distribución de electricidad. La mayoría de las PUC también proporcionan un mecanismo para que los clientes y las organizaciones presenten sus comentarios públicos por escrito y también pueden llevar a cabo audiencias públicas para que la gente exprese sus comentarios y preocupaciones sobre los planes de la empresa de servicios públicos. Todas las personas deben tener acceso a infraestructuras y sistemas de producción de energía limpia y sostenible.

Equidad energética

Como se menciona en la Historia de Nuestro Sistema Energético, el sistema energético que tenemos no es equitativo. Debido a las prácticas de redlining y a otras políticas históricamente racistas, las comunidades de personas de raza Negra, Indígenas, de color y de bajos ingresos suelen tener un servicio eléctrico menos confiable, tienen más probabilidades de vivir cerca de centrales de combustibles fósiles contaminantes e incurren costos de energía más elevadas. Además, esas mismas comunidades han sido históricamente excluidas de los procesos de toma de decisiones que afectan a sus hogares. Muchas PUC estatales supervisan las decisiones relacionadas con la forma en que las empresas de servicios públicos generan y distribuyen la energía y las tarifas que pagan los consumidores. Es vital que todas las comunidades tengan la capacidad de influir en la toma de decisiones que afecten a sus vidas.

Impactos climáticos

Los efectos del cambio climático están bien documentados. Las comunidades de todo el país están experimentando más casos de inundaciones, calor extremo, sequías y tormentas dañinas. La quema de combustibles fósiles para generar electricidad contribuye a la contaminación atmosférica local y al cambio climático, una motivación primordial para muchos estados que están incentivando inversiones significativas en energías renovables y sistemas de almacenamiento de energía para dejar de utilizar combustibles fósiles.

Aunque muchas PUCs juegan un papel importante al aprobar (o rechazar) las inversiones de las empresas de servicios públicos a través de sus Planes de Recursos Integrados a largo plazo, los cuales determinan si las empresas de servicios públicos reducen su dependencia de los combustibles fósiles e invierten en energías limpias como la eólica, la solar y el almacenamiento de energía, desafortunadamente la mayoría de las PUCs estatales no tienen autoridad legal para considerar el cambio climático en sus decisiones.

Varios estados han comenzado a remediar esta deficiencia importante al promulgar leyes que otorgan a las PUCs la autoridad para considerar los impactos del cambio climático en la toma de decisiones sobre los IRP, incluyendo a Michigan y Minnesota. Todas las PUC deberían considerar los impactos del cambio climático, la salud, la equidad y la asequibilidad.

Paso 3: Participa

Participe en audiencias públicas:

  • Haga clic en este enlace para acceder a los sitios web de su estado y de la comisión estatal. La mayoría de los sitios tienen un enlace para "audiencias" y cuentan con un calendario de las próximas audiencias.
  • Si hay una audiencia pública programada sobre un tema que le interese, usted puede asistir e inscribirse para ofrecer sus comentarios.
    • Si usted necesita un traductor durante la audiencia, póngase en contacto con la comisión para solicitarlo.
  • Algunos sitios web de las comisiones estatales le permiten inscribirse para recibir alertas con información sobre las próximas reuniones y audiencias. Si este servicio está disponible, es una buena forma de mantenerse informado y saber cuándo presentar sus comentarios o asistir a las reuniones.
  • Si aún no se ha programado una audiencia sobre un asunto o tema de su interés, usted puede solicitarla.
    • Escriba una carta y envíela a la comisión para solicitar una audiencia pública.
    • También puede utilizar a los medios de comunicación para promover una audiencia escribiendo una carta al director o un artículo de opinión en su periódico local.
  • A veces es buena idea asistir a una audiencia aunque el asunto de su interés no forme parte del orden del día. Por lo general, usted puede hacer comentarios y solicitar una audiencia pública de esa manera.
  • Algunas PUC estatales (aunque no todas) tienen una división o una oficina de Justicia Ambiental o de Justicia Energética, las cuales a menudo pueden ofrecer información útil sobre el trabajo que la PUC está realizando en cuestiones de equidad energética en su estado. Busque un enlace a esta oficina en el perfil de su estado.

Participe en el proceso electoral de su comisión:

  • Si su comisión es elegida, aproveche las elecciones para impulsar su causa. ¡Participe en el proceso electoral y vote por una persona que represente sus intereses!

Colabore con otros:

  • Algunos estados o procedimientos solamente permiten que los intervinientes aprobados envíen sus comentarios. Si este es el caso, busque la lista de intervinientes, encuentre una organización o grupo que esté alineado con sus valores y explore oportunidades de colaboración. Haga clic en este enlace para encontrar información sobre su estado.
  • También puede enviar solicitudes para intervenir en un procedimiento, mismas que deberían aprobarse si usted puede explicar su interés en el asunto.

Encuentre expertos locales:

  • UCS cuenta con una Red Científica formada por expertos técnicos que pueden ayudarle a enviar sus comentarios. Los expertos son personas u organizaciones que pueden apoyar sus comentarios con conocimientos técnicos. Póngase en contacto con la Red Científica aquí y le ayudaremos a encontrar a los expertos adecuados con quienes usted podrá colaborar.
  • Recuerde: USTED también es un experto. Piense en los conocimientos que aporta (sus experiencias vividas, el conocimiento de su comunidad, los conocimientos especializados, etc.) y en cómo puede colaborar con otros expertos.

Haga llegar a la comisión sus opiniones sobre cuestiones específicas:

Usted puede enviar sus comentarios a la comisión de su estado sobre cuestiones o preocupaciones específicas que estén relacionadas con un expediente público abierto. Algunos ejemplos de estos expedientes pueden ser una solicitud presentada por una empresa de servicios públicos para aumentar el precio de la electricidad, los planes de las empresas de servicios públicos para construir infraestructuras o el despliegue de nuevas tecnologías como la energía solar y los sistemas de almacenamiento de energía.

Consulte el sitio web de su comisión estatal local para conocer los expedientes abiertos en los que usted pueda presentar sus comentarios.

Involúcrese cuando los legisladores de su estado aborden cuestiones energéticas:

  • Las acciones legislativas pueden ayudar a ampliar o limitar la autoridad de una comisión y su influencia sobre las empresas de servicios públicos. De ser necesario, usted también puede abogar a favor de los cambios necesarios ante sus representantes o senadores estatales.
  • UCS tiene campañas activas en algunos estados. Visite nuestro sitio web para conocer las acciones que estamos llevando a cabo.
  • Haga clic en este enlace para encontrar información sobre su estado.

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